Pensamos que vivimos una vida ordenada y segura, pero es un error como un pino de grande. Apenas un minusculo fragmento de azar nos separa del desastre. Vamos por la calle pensando en nuestras cosas, cosas que consideramos importantisimas, y no sabemos que tras las esquinas se esconden demonios prestos a destrozar el cansino caminar de la rutina. Dicen que solo se posee lo que no te pueden quitar... Pero entonces no tendriamos nada. Y de hecho es asi: todo es una ilusion. Cruzas una calle distraido y te atropella un autobus. Cruzas una calle perfectamente atento y te atropella un autobus de conductor distraido. Es una pura ilusion pensar que todo depende de nosotros, que si ponemos la suficiente voluntad podremos aprehender las leyes a traves de las cuales se mueve nuestra vida.Cada momento de la existencia es un sorteo de loteria donde suele salir el numero de nuestra fortuna... ¿Y si un dia no sale? ¿Y si nos ganamos un desastre?
Quizas por eso me gusta aparcar de vez en cuando el trineo y pararme a ver la miriada de reflejos que nacen en cada uno de los copos de nieve. Cada uno es un pequeño milagro porque ha podido sobrevivir al siniestro sorteo de la fatalidad. Y si asi no fuera, me gusta pensar que el que ha sobrevivido he sido, una vez mas, yo. Y que por eso puedo permitirme el lujo de poseer un minimo momento para contemplar copos de nieve. Cada minuto que nos pertenece es un milagro, un regalo... Y tenemos la desafortunada costumbre de ignorarlo.
Desde un punto de vista lógico....tienes mucha razón, es más...!tienes toda la razón!. Pero qué pasaría si nuestros días como vivos estuvieran ya proscritos por el destino, y tal que asi, independientemente de lo que supongamos, analizaramos o pensaramos....pues acabaría pasando lo que fuera que pasase.
ResponderEliminarCuando uno se encierra en su rutinaria seguridad, un pensamiento que descontrola lo evidente puede ayudar a suspirar agusto. El pensamiento de la muerte ayuda a vivir.
Pero tambien existe la posibilidad de que todo sea mas grnade de lo que podamos imaginar. Que existiendo o sin existir la naturaleza de muchas cosas seguiría su camino sin mas...sin importarle que un día estuve preocupada por querer sentir la vida.
A veces, me gusta salirme de mi "yo"...no salvarme de ese autobús, o dejar de pensar en primera persona. Entonces, me convierto en un gran hormiguero, en la voz de un nino, en el aire q corre, en el color del café, en una carta...o en nada, sencillamente dejo de creer que existo
Enviado por Mati.