miércoles, 10 de mayo de 2006

menuda tormenta...

Y aun no ha pasado. Muchos dias sin comunicacion y trabajando a base de bien... y no ha sido placentero. Para nada lo ha sido.  Demasiado disgusto y demasiado sentirse prisionero. Y no me refiero tan solo al cuidado de las estaciones metereologicas que me mantienen aqui. Eso me agoto hace un par de semanas. Todo un puente dedicado a tender cables de ocho de la mañana a doce de la noche. Demasiado. Pero solo es trabajo. A mi me cansa mucho mas el cuidar los compromisos que uno mismo se crea con el paso del tiempo y de la gente por tu vida. Hay algunas culturas que piensan que si ayudas a alguien te haces responsable de el. Ocasionalmente esas responsabilidades me recuerdan el porque estoy aqui, tan lejos del tropico. Me cansan esas relacciones agotadas, que no te pueden proporcionar nada nuevo. Ni sorpresas en la persona (y de eso no me quejo), ni sorpresas o placeres en las situaciones comunes. Cuando la camaraderia no existio nunca es dificil continuar cuando la novedad hace mucho tiempo que acabo. No soporto los vacios, esos silencios que te hacen sacar aire del pecho para llenarlos con cualquier tonteria. ¿Tan dificil es sentirse bien en silencio? Pero tampoco puedo quejarme, yo acepte la responsabilidad de esa carga. No puedo ahora abandonarla. Tan solo me lamento un poquitin... solo un poquitin.

   Lo cierto es que no todo fue tan cansado y agobiante. Pasaron por mi iglu un grupo de exploradoras polares camino de "no se que" yacimiento. Aunque no me quedo claro con quien querian yacer. En especial una es un encanto, es como si estuviera floreciendo ahora, tan tarde en su vida.... Pero siempre es bonito de observar.

   Lo mejor del dia es que acompañare a la Reina de Thule a la opera. "The fairy Queen". Creo que trata de la reina de Villarriba y de como salva a su pueblo de una terrible apuesta con sus mortales enemigos de Villabajo para ver quien lavaba antes la paellera.


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